La revolución de la comida callejera

Buffalo Waffles, gourmet y al paso

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El amor llevó a Stefan Feddersen y un grupo de amigos hasta Córdoba, Argentina. Allí, este joven emprendedor oriundo de Antofagasta no solo conquistó a su futura mujer, sino que se dejó conquistar por unos originales waffles salados.

Buffalo Waffles, gourmet y al paso

Los probó, le encantaron y no dejó de pensar en ellos durante todo el viaje de vuelta en auto. Empezó a tirar ideas de instalar una wafflería en Santiago. En la radio sonaba Bob Marley con su himno Buffalo Soldier. Entre risas y cantos de los amigos, la letra derivó a Buffalo Waffles. Sin saberlo, había nacido su emprendimiento gastronómico.

La revolución de la comida callejera

Trató de entusiasmar a algunos socios, hasta que su amigo Thomas Schulze-Boing se subió a bordo. Vinieron meses intensos de probar recetas de masas, testear ingredientes y combinaciones y encontrar el lugar idóneo. Finalmente en agosto de 2013 abrieron las puertas de su local al paso en Merced, donde ambos socios hacían de todo: cocinaban, atendían, limpiaban.

La revolución de la comida callejera

"El primer mes no fue fácil, al principio nos miraban con cara rara. La gente no conocía los waffles y menos los salados. Pero después del segundo mes, despegamos. Hoy ese local tiene cola todo el día", cuenta Stefan. A su juicio a la gente le gustó el concepto, el formato tipo taco gigante en cucurucho que se presta para comer mientras se camina. Siempre pensaron en crecer –"aunque orgánicamente" – y hace un par de meses abrieron su segundo local, esta vez con algunas mesitas, en la calle Holanda, Providencia. Además de aceptar pagos con TC y Redcompra para mayor comodidad de sus clientes, ofrecen el servicio de catering con un food track que instalan en ferias, festivales, eventos y matrimonios.

Stefan cuenta que sus waffles se han ganado un espacio en el paladar de los santiaguinos y también de los cientos de turistas que repletan sus locales. Tanto así que la carta es prácticamente la misma desde que partieron. “Tenemos promos del mes, waffles de temporada, pero a la gente le gusta nuestra carta clásica”, cuenta. Dulceros y salados tienen para regodearse. “Nuestros productos estrellas son el ‘cheddar’ (con tocino crujiente, rúcula, tomate cherry, lluvia de papas hilo y salsa de ajo) y el ‘strawberryfields’ que tiene nutella, manjar, crema chantilly, plátano y frutilla”, dice con una sonrisa.