1El COVID-19 impulsa un cambio fundamental hacia un comportamiento basado en valores y la formación de 4 nuevas "economías".

ECONOMÍA SALUDABLE HOLÍSTICA: el consumidor busca productos y servicios para aumentar su bienestar personal e integral.

ECONOMÍA DE LA AUTENTICIDAD: el consumidor privilegia aquellos comercios locales, de barrio, que le dan mayor confianza y seguridad.

ECONOMÍA DEL PROPÓSITO: el consumidor se ha vuelto más consciente, busca el consumo ético con el fin de ser un aporte a la sociedad y al bien común.

ECONOMÍA SOCIAL: el consumidor anhela y elige nuevas formas de conectarse y crear, busca la colaboración y la pertenencia.

2La pandemia ha reformado el comportamiento de los nuevos consumidores, los que se pueden agrupar en 4 perfiles.

EXTREMADAMENTE PREOCUPADO: por su salud, sus finanzas y con mucho temor por salir a la calle tal como lo hacía antes de la pandemia.

RETORNADOR TENTATIVO: Toma precauciones para su retorno a la sociedad y a sus rutinas normales, reduce gastos, recorta presupuestos con cierto nivel de temor por su salud y la situación económica actual y venidera.

REINVENTADO: este consumidor ha modificado sus hábitos de consumo. Busca ser más sostenible y es más consciente de la salud. Se atreve a visitar lugares públicos e incluso a viajar y se abre notoriamente a la compra en línea.

BUSCADOR DE LA NORMALIDAD: este grupo permanece más indiferente a los cambios y aspira a volver a como estaban las cosas antes.

3Los chilenos han cambiado su prioridad de consumo, prefiriendo productos locales y un consumo más consciente.

Se observa una revaloración del comercio pequeño, las tiendas de barrio, los productos locales, las marcas chilenas y la cercanía con los locatarios. Destaca la preferencia por lo auténtico, lo propio y original.

4Nuevos usuarios están recurriendo al comercio electrónico, con consecuencias en el largo plazo.

Al igual que el consumidor global, los chilenos y chilenas han disparado sus compras en línea durante la pandemia. Muchas personas que antes no compraban online, hoy ya lo hacen con soltura, lo que indica que esta tendencia se mantendrá en el tiempo, incluso con vacunación masiva e inmunidad de rebaño. El desafío, apunta el estudio, es facilitar a los nuevos usuarios digitales descubrir, explorar y comprar en línea. “Explorar nuevas asociaciones a través de diferentes formas de comercio digital y capacidades omnicanales para desbloquear los caminos digitales para la compra”.