En agosto, Mes del Niño:
Compartir:
TweetEs tiempo de que grandes y chicos renovemos la esperanza, subamos el ánimo y nos reentusiasmemos con la vida. El comercio minorista puede ayudar, creando un impacto favorable en los niveles de felicidad de niños y jóvenes. Por ello, este mes en que tradicionalmente celebramos el Día del Niño, podemos enfocarnos en buscar formas de conectar con sus anhelos y necesidades.
Distintos estudios, nacionales e internacionales, definen a los papás y mamás de hoy como “más desgastados". Sus hijos, a la vez, están “más aburridos” y con una mayor propensión a la “irritabilidad”. Síntomas claros del estrés causado por las restricciones impuestas por la pandemia en nuestra vida diaria.
En este escenario, que mejor que activar la venta de productos y servicios asociados al deporte y la vida al aire libre para contribuir a sacar a los menores de las pantallas y del sedentarismo.
También es el momento para promover la venta de mascotas, propiciando una conexión emocional positiva que fomente el cuidado y cariño por los animales, que tanto sirve para bajar los niveles de frustración y aislamiento.
Es hora de impulsar campañas en favor de la alimentación saludable para ayudar a frenar el sobrepeso infantil, un problema que se ha agudizado en nuestro país. Cafeterías y restaurantes pueden sumarse e idear menús que sean ricos y energizantes para los más chicos, sin abusar de azúcares ni grasas.
El llamado al comercio es a estar atentos a las necesidades de las familias en etapa de crianza. Busquemos formas creativas para entretener, animar y activar a los niños y jóvenes que han estado confinados, apostando por entregarles opciones para mejorar su salud física y mental.